sábado, diciembre 20, 2008

LUNA LLENA, LUNA LLENA, AH...AH....


CONSULTA DE LA DRA. MULDER (AFAMADA PSIQUIATRA DEL ALMA)

Capítulo II

Hoy es Sábado.... sábado, y nuestra doctora al echar la garra sobre el suelo al levantarse de la cama, se siente ciertamente inspirada......

- ¡ Ay......... qué semanita que llevo.......... Sábado, y qué contenta que estoy. ¡¡ Qué hoy es sábado, Salomé ¡¡¡¡, prepárame ese desayuno como tú sólo sabes. Que voy a darme un baño de espuma, con ese gel de Mousse de hojas de gusano de seda disecadas que me regaló Rosavioleta..
- Ahora mismo se lo preparo, Elisabeth, ¿ tostada, o bollito relleno de mantequilla?.
- Bollito Salomé............. siempre bollito y calentitooooo, calentitooooo....

Sobre el fondo se escucha una melodía. Salomé, siempre pone el tocadiscos al llegar a casa de la Dra. Mulder.
- Ven aquí, guayabita – le dice a Salomé. La toma de la cintura, bien agarraita y comienzan a bailar.
Y es que la Dra. Mulder sabe como tomar a una mujer y no dejarla escapar. Sabe como quebrar bien el cuerpo de una dama.

Salome, anda como amaestrada por nuestra doctora, y aunque está casada y bien casada, los bailes con la Dra. Mulder son muy habituales y refrescantes. Ya ha aprendido a pillarle el ritmo al primer compás sobre el parquet.

- Ay Elisabeth, que bien baila usted.....
- ¿Mmm..... qué dices Salo,?
- Que cada día me gusta más bailar con usted. Más que con mi Federico, que no sabe ni tomarme bien de la cintura.
- Ay, Salo, guayabita, tú déjate llevar, que yo te llevaré al Paraíso......
- Ay, Si, señora, Si, que belleza... Mmmmmm, ¡¡¡¡¡¡ Qué empiezo a volar, a despegar.... ¡¡¡¡¡¡ Elisabeth, que me reconvierto..........¡¡¡¡¡¡ Que Dios me perdone Dra. Mulder.............. Que me salgo de mí, de mis hechuras, de mis firmes convicciones. Ay .................Qué humedad que hace doctora ¡¡¡¡¡¡.
- ¿Qué?......... Si, ya sabes que en Barcelona es lo normal. Mi Salome, que chulaza que estás, qué formitas tan blandas y dulces........ – Salome la mira algo anonadada – Pero ya sabes que ahora estoy muy enamorada, y cuando esto me ocurre............Me vuelvo.....¡¡¡¡¡¡ una ESTRECHA¡¡¡¡¡. ¿Por qué será Salo, por qué será? - Mientras, Salome se deja embargar por todo el glamour de nuestra doctora.
Salome, es una monada de veintitantos añitos. Mujer de gustos muy clásicos y de una tolerancia exquisita. Y esas formas tan bien elegidas por nuestra doctora para las labores del hogar, redondito aquí y allá, y esas sonrisitas siempre Incandescentes¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡.

Y la canción sigue sonando. Es “Luna Llena” de Isabel Pantoja.
Y nuestra doctora canta sobre la voz de la panto, mientras Salomé, queda semi-hipnotizada, acariciando con su mirada los cristalinos ojos verdes de nuestra doctora...... . Y es ahora cuando la Dra. Mulder al mirarla apoya su mejilla sobre la mejilla de Salome. “ Luna llenaaa, luna llena, aaahh, luna llenaaaaaaaa........- sigue cantando.
“Ahora......
porque puedo y quiero
yo te voy a haceeeerrrrrr.......
El ser más feliz de la tierra
entera........
Ahora,
que diferencia,
Tienes paciencia, fe y valor.
Te voy a enseñar a ser amigo,
Para que seas grande en libertaaaaaad
y en honor.
Hoy que hay luna llena Tú y yo.........
Beberemos juntos,
Un brebaje con el sabor
de la libeeeeeeeertad.............
Luna llenaaa, luna llena, aaahh,, luna llenaaaaaaaa........”

- Ya sabes que hoy es sábado, y............ VIENE a visitarme Marguerite. Perfuma todas las sábanas con mi perfume predilecto para ella............. ya sabes cuál es. ¿no?
- Si, Dña. Elisabeth, con el de Van Cleef Arpels.
- No, Salo..... con Mystere de Rochas,............ ése la enloquece, y preciso de él.
- Es que, Dra. Mulder, como tiene tantos sobre la repisa del baño y con cada amorío utiliza uno diferente............... A Jandra, le volvía loca el pachulí. A Teruca, el extracto de violeta. A Paloma, las rosas blancas de Padua....
- Si,.............. jajajajaja si, para ya......... para ya...... El perfume, Salo, enajena de tal manera, que al envolverte en sus notas puedes sentir un petit orgasme... Y cada femme precisa de uno diferente.
- Baja a Dña. Cloti, compra unos bocaditos de nata y unas trufas de medianoche. Una botella de Moêt Chandon y dos tulipanes blancos, que te los envuelva en papel de seda azul, y nueces y almendras por un Tubo. Dña. Cloti, ya sabes que tiene de todo, y si no ella se encargará de obtenerlo con sus buenas artes....... jajajajaja. Ayyyyhhh...... qué estupenda que es Cloti. Y tú también, Salo...... cuánto te quiero..... - Y siguen bailando “Luna llena, ah, ah....”.

Y es que nuestra doctora está comenzando a sentir de nuevo el amor, siempre el amor, otra vez el amor, bienvenido el amor.... Y Dios creó El Amor.........
Salomé mira a nuestra doctora con el ceño fruncido. - Piensa que ha tenido tantas amantes, tantos amoríos, tantos affaires......... Tanta têtê a têtê, Tanta bouche a bouche. Ha bebido de tantos clítoris ajazminados, que dice ella. ¿Será este su verdadero amor?, ¿podrá esta niña enamorar a mi Elisabeth?. No sé, no sé..... es demasiado glamour el de mi Elisabeth.

- Ah, y se me olvidaba, Salo, prepara el jacuzzi con toallas limpias, las de color azul cielo preñado de amor. Baña a Sofía, cárdale el pelito y ponle su colonia de extractos de frambuesa y ponle dentro de la boca, su elixir de fresas. ¡¡¡¡¡ A Marguerita, le gusta tanto acariciarla ¡¡¡¡¡ Y besarla¡¡¡¡¡¡......... Esta niña no me deja de sorprender, pero es que Sofía es una foster tan mona........
- No se ponga celosa, Elisabeth.

Ahora recuerda la Dra. Mulder, el día que conoció a Marguerita en su consulta, aquel día – piensa - me encontraba algo atolondrada. Y Marguerita llamó a mi puerta como una paciente más.
- ¿ Es Ud. La Dra. Mulder?
- Así es, guayabita, ya sé que estabas citada, pasa, pasa a mi despacho.... – y ya frente a mí, desde el primer momento su presencia me invadió de una paz, de una paz inexplicable. El tiempo se detuvo como se detuvo extrañamente en el reloj de la pared. Extrañamente se detuvieron mis manos siempre habituadas a gesticular. Se detuvieron mis pupilas dentro de sus pupilas..... Se detuvo todo el aire, toda la vida.............hasta mi centro. Todo paz, amor, sabiduría y bienestar. Mmmmmmm....................Mi Marguerita....

Marguerita acudió a mi consulta victima de una depresión, o más que depre...ón, desesperación ante el abandono de su amante. Y ya desde el primer instante sólo quise besarla, y así lo hice. No sé si fui yo, quien la beso, o aquel mundo al que ella me transportó. Pero si, la bese dulcemente sobre unos labios muy cerrados. Ella por un momento se asustó...................Pero un instante después vi sobre el azul de su mirada, esa sonrisa que a veces te hace la belleza, tan difícil de hallar.

- Verás, Marguerita – dije tumbándola sobre el diván, casi abrazándola - tendré que hacerte una pequeña sesión de hipnosis...
- Dra. No me la han hecho nunca¡¡¡¡¡¡.. usted cree que es necesario dormirme - dijo mirándome hecha un asco.
- Así es Marguerite, cierra los ojos y relájate - Alguien, guayabita, que desde luego no conozco, ni quiero conocer, te ha hecho demasiado daño, y debo descubrir como curarte. Debo adentrarme en tu interior, descubrir tus miedos, todos tus deseos, para aplicarte la terapia más adecuada, Okey?. –

Y la verdad es que yo ardía en ganas de conocer su alma, todo su universo. Era tan bella, tan sideral. Debía descubrir su dolor y su vida...Y además de ello poder curarla. Mi pobre Marguerita, Ma Femme Fatal, cuánto dolor, cuánto daño te han hecho......

Pude observar todo su cuerpo sobre una dulce respiración. A aquellos abultaditos merengues de nata respirando....... que me hacían gritar y temblar de deseo a mis manos. A aquellas sus manos protegiendo al suave y frondoso bosque de su sexo. A aquel rictus sobre su boca, formado de inteligencia. Esa sonrisa que a veces te hace la belleza, tan difícil de explicar.....

- Y Ya tenía a Marguerita sobre el diván Hipnotizada...... Cuando le dije........ (próximo capítulo).

domingo, diciembre 07, 2008

SEVILLA ERA MUJER


CONSULTA DE LA DRA. MULDER (AFAMADA PSIQUIATRA DEL ALMA)

Capítulo I


- Buenos días, ¿ es la consulta de la doctora Elisabeth Mulder?- dice una voz como adormecida.
- Así es, señorita – se escucha una voz todavía más adormecida, y es que la Dra. Mulder acostumbra a hablar casi susurrando a todas sus pacientes.
- Quisiera concertar una cita con Ud. Por favor, me puede dar, día y hora?
- Su nombre, por favor?
- Elia
- Edad?
- Es que ahora no me acuerdo, que más da no...?
- Mmmmmm, jajaja, Mmmmmm... - la doctora se ríe también como susurrando - Simplemente era un dato, un pequeño dato que ahora que lo pienso no tiene ninguna importancia.
- Muy bien, Elia, el viernes a las 6 de la tarde, Ok?
- Perfecto, doctora, hasta el viernes.
La Dra. Mulder, en su consulta atiende a damas que atienden y entienden. Ella es así y no lo puede evitar. - Ah¡¡, qué tendrán las mujeres que me enloquecen, que me embriagan todas sus neuras, sus obsesiones y enfermedades del alma, ¡¡ Ah, qué tendrán las mujercitas, esas dichosas hembras. Mis diosas... ¡¡. -


Elia, está sentada al otro lado de la mesa con la Dra. Mulder.

-¿Y bien, Elia, cuéntame lo que te ocurre, qué es lo que te pasa ?, permíteme que te tutee, eres bastante más joven que yo, ¿ algún amorío con una mujer, un desengaño, quizás anhelas el amor?, cuéntame, estoy aquí para escucharte.
- Mmmmm........me encuentro como flotando sobre una nube que constantemente se mueve, a veces temo caerme de ella, no sé, no puedo concentrarme en nada, estoy hecha un asco, un lío enredado. En realidad no sé lo que me pasa, por eso vengo a Ud., para ver si puede aclararme un poco la cabeza.
- Yo estoy aquí para escucharte, Elia, para ayudarte.
- Todo....... todo comenzó aquel día que yo paseaba por el Parque de Maria Luisa en Sevilla, me fui allí para aprender el arte en la perfección de la pintura al lado de una gran pintora, Filipa. ¿No ha oído hablar de ella?
- ¿ Ah, Filipa Roterdini?, es también clienta mía, y muy bollito por cierto. Habrás tenido que tener un cierto cuidado con ella, ya sabes como es ¡!!!!!!...... Cuando menos te lo esperas....Zas, tiene unas manos muy buenas para la pintura y demasiado largas y delicadas...... ya me entiendes.
- Ya, pero no ....... quiero decir, que si, que es cierto que por ella vine a Ud.. Ella me dijo que la doctora Mulder era la mejor psiquiatra de nuestro colectivo.
- Te agradezco el elogio, guayabita, y bien, Elia, vayamos al grano, estoy ansiosa por conocer tu historia.
- Desde que llegué a Sevilla, doctora, la vida sobre una ciudad tan bella comenzó a parecerme mucho más amable y hermosa. El aire tibio de aquella ciudad con el aroma de la pequeña rosa del Sur, el aroma a jazmín, a aquellas violetas adormeciéndose sobre los balcones, a aquellas casas que me hablaban. El olor de Sevilla hizo en mi magia, Dra. Mulder, y es así que al volver a mi ciudad natal me quede profundamente triste, sentí que perdía oxígeno, que me faltaba el aire. Porque Sevilla, me envolvió de tal manera. Y el alma allí, el alma allí, en Sevilla, Dra. Mulder, se torna solo aire y perfume.
- Ejjjejjjjjje- carraspea la doctora - Lo comprendo, Sevilla, es preciosa, pero sígueme contando, Elia, además de lo del perfume, ¿ qué te ocurrió en Sevilla, qué ocurrió en el parque de Maria Luisa, aquel día?.
- Aquel día, doctora, descubrí bajo unos naranjos a una bella mujer. Ella estaba pintando sobre un lienzo a un pavo real con todo su bello plumaje abierto, lleno de color. Y como si el pavito supiera que ella le estaba eternizando sobre aquel lienzo, permanecía muy quieto como hipnotizado mirando los hermosos ojos verdes de ella. Aquella mirada verde inundó mis pupilas desde el primer instante... . Era una dama de una edad media, como Ud., Doctora Mulder, tan preciosa, tan bella como la misma Sevilla.

-Como le iba contando, Doctora, después de tan sólo mirarnos intensamente, en silencio, cogí de su mano y la llevé a mi estudio de pintura, estudio que yo compartía con Filipa. Y así fue, que sin hablar, hablaron nuestros cuerpos. Y mientras yo le amaba, doctora, y mi cuerpo se enroscaba entre su cuerpo, mi alma, como en un alto grado de enajenación, recorría no a su cuerpo sino a aquellas bellas calles de Sevilla. Y el olor de azahar se desprendía de todo su cuerpo, conforme mis manos más lo acariciaban. Sus brazos, como dos rosas trepadoras me arañaban de caricias la espalda. Y como una abeja delicada, libaba de mi sexo muy despacio, casi a cámara lenta, mientras sobre sus pupilas, yo sólo veía a Sevilla, a Sevilla, Dra. Mulder.
- Sí, sí, tranquila, Elia, que yo también discurro por el camino del rocío, y es tan delicado – dijo la Dra. Mulder, dejando a Elia algo descolocada.

- ¿Qué...? Es extraño, Dra. Mulder, pero aquella mujer casi no hablaba, y sin embargo cuando me miraba, me amaba, me lo decía todo. Era... era una mujer ciertamente extraña. Me enamoré de ella, Dra. Mulder, y sin embargo, desde aquel único día en que la conocí y nos amamos, no he vuelto a saber de ella. Y la amo tanto. Era tan bella, tan irracional, tan bestia. Pero Filipa, que la conocía de oídas. Ya sabe ....... los pintores de una misma ciudad se conocen todos. Me dijo que era la Musa de “Celine”. Filipa, me comentó que Celine la tenía como subyugada, que no la dejaba apenas respirar. No me extraña que me pillara la tía al vuelo, ¡ ay mi pobre Marieta, sabe doctora, se llamaba Marieta!
- Te equivocas, Elia, ella se llamaba Sevilla, - la doctora se ha dado cuenta, que mientras Elia cree amar a una mujer, Marieta, en realidad el amor, su amor es y fue Sevilla. En estos momentos está pensando que terapia va a ofrecer a su bella clienta.........
- Bueno, mi querida Elia, ¿ qué tal duermes por las noches?.
- Algo regular doctora.
- Tan sólo te mandaré unas pastillitas relajantes. Además son de sabores. Una medicación especial que hace una empresa de Hong Kong para nuestro colectivo. Y tienes de sabor a “ pezoncito “, a “ clítoris no me envenenes más “, para las niñas a las que se les ha atragantado algún clítoris en mal estado. Y “ clítoris ajazminado”. Qué quieres que te diga, Elia, a mí ése me vuelve loca. Te aseguro que la noche que lo tomo se me sube el placer hasta las trancas. Ah, y vas a pintar un cuadro para mí, un cuadro de Sevilla. Tómate todo el tiempo que quieras ¿ de acuerdo?. Me encantaría que me lo regalases, habrás notado que utilizo el arte en mis terapias..... Y no te preocupes, yo la consulta privada la cobro en especie. Cuadros, fetiches, y otras tantas fruslerías....... que ni te puedes imaginar......Jajaja...
Y sobre todo, piensa, y ya te darás cuenta, que en realidad aquella mujer, Marieta, tan sólo fue una proyección, una proyección de tu amor a Sevilla. Sevilla te invadió de amor, y los seres humanos sólo podemos canalizar el amor a través de otra figura humana. SEVILLA, supo hacerse mujer para enamorarte, SEVILLA ERA MUJER ....................... fue mujer, y qué belleza verdad....!!!!!!!!!!!!!
Dame un besin cariñin, ya sabes donde estoy, Ah ¡!!!!!!! y espero ansiosa tu cuadro.

- Pintaré su cuadro. Adiós, Dra. Mulder, volveré muy pronto. Ah, y no se lo había dicho, tiene Ud. como la escritora, Elisabeht Mulder, unos ojos verdes preciosos de gata enamorada.
- Ya lo sé, mi niña, ya lo sé, en realidad, la Mulder, era tía abuela mía......
- CLOK,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,, SE CIERRA LA PUERTA DE LA CONSULTA.
Y es que nuestra Doctora, está esperando de nuevo, la exquisita visita de otra atormentada dama......

viernes, noviembre 21, 2008

El Amor es Callado


El amor
Es callado,
Latirá,
Silencio...
Escucha sólo a tu corazón...
Quizás no te des cuenta
Pero está siempre dentro de ti,
Aunque creas olvidarlo...

El amor
Es callado...
Recogí tus manos en mi pecho
Y del calor de tus manos
Crecieron de mis senos flores divinas
Que en tí se enredaron...
Uniéndonos tan frágilmente....
Tan dulcemente....

El amor
Es callado...
Acaricié tus pensamientos
Mientras tú
Acariciabas los míos...
Silencio...
Buceaba dentro de tu cuerpo,
Cuando sentí como toda tu figura
Era absorbida por mi corazón...

Caminando así hacia el placer del alma...
Se encontraron
tan sólo
y tanto,
Tu cuerpo y el mío....


Cleo

sábado, noviembre 01, 2008

AMOR CONDUSSE NOI AD UNA MORTE


Amar es una angustia, una pregunta,
una suspensa y luminosa duda;
es un querer saber todo lo tuyo
y a la vez un temor de al fin saberlo.

Amar es reconstruir, cuando te alejas,
tus pasos, tus silencios, tus palabras,
y pretender seguir tu pensamiento
cuando a mi lado, al fin inmóvil, callas.

Amar es una cólera secreta,
una helada y diabólica soberbia.

Amar es no dormir cuando en mi lecho
sueñas entre mis brazos que te ciñen,
y odiar el sueño en que, bajo tu frente,
acaso en otros brazos te abandonas.

Amar es escuchar sobre tu pecho,
hasta colmar la oreja codiciosa,
el rumor de tu sangre y la marea
de tu respiración acompasada.

Amar es absorber tu joven savia
y juntar nuestras bocas en un cauce
hasta que de la brisa de tu aliento
se impregnen para siempre mis entrañas.

Amar es una envidia verde y muda,
una sutil y lúcida avaricia.

Amar es provocar el dulce instante
en que tu piel busca mi piel despierta;
saciar a un tiempo la avidez nocturna
y morir otra vez la misma muerte
provisional, desgarradora, oscura.

Amar es una sed, la de la llaga
que arde sin consumirse ni cerrarse,
y el hambre de una boca atormentada
que pide más y más y no se sacia.

Amar es una insólita lujuria
y una gula voraz, siempre desierta.
Pero amar es también cerrar los ojos,
dejar que el sueño invada nuestro cuerpo
como un río de olvido y de tinieblas,
y navegar sin rumbo, a la deriva:
porque amar es, al fin, una indolencia.

viernes, octubre 24, 2008

Un beso Marta

Lectura recomendada, de un tiempo de cambios sociales - llevamos todo el peso a cuestas de una religión ya caduca, que ni ella misma cree en lo que proclama -de la inexistente educación a nuestros pequeños y adolescentes - algunos de ellos, y seguro que no pocos, amarán a un ser de su mismo sexo - de los roles sociales de imagen - ya es tiempo de cambiar - pero sobre todo, "Amores Prohibidos" de Marta Fagés, nos habla de amor.....

jueves, octubre 16, 2008

Radio Alternativa BCN, entrevista en el programa Llegir en cas d´incendi








Ayer, Xavier Borrell, en Radio Alternativa BCN, en su programa, " Llegir en cas d´incendi", me realizó una entrevista, me hizo mucha ilusión, ya que es mi primera entrevista. El programa tiene una duración de más de una hora, así que yo salgo más o menos en la mitad de dicho programa. Os pongo el enlace para que lo podáis escuchar. Gracias por todo a Isabel del Rio Sanz, y a Xavier Borrell, ambos escritores.


domingo, septiembre 28, 2008

Últimos Instantes; Poesía de Marta Fagés



Ya no recuerdo si eran las seis
o las siete.
Sólo recuerdo haberme despertado
envuelta en la tibieza de íntimos rocíos,
bañada en oro de sol naciente.
Por la ventana, la luna bostezaba un adiós
que acariciaba a su amante,
cuerpo y ser perdidos en el encuentro…
Eran minutos de intimidad furtiva,
que no fueron creados para prolongaciones
ni eternidades.

Mientras,
mi corazón aullaba de nostalgia.
Apuraba los últimos instantes
del olor de tu pelo, del arco de tus labios,
y la infantil inocencia imperturbada
de tu sueño volando calmo entre mis brazos.

No era día aquél para levarse al alba,
sino de maldecir el quiebre de la noche.
Quise sorber tu cuerpo hasta lo último
y no dejar nada de él para otro día
que acaso no habría de existir.

Despierta, te dije estremecida.
Besé tu piel y tú desperezaste una sonrisa.
¿Qué hora es?, preguntaste.
Contesté, y no recuerdo si dije en punto,
o si fue y cuarto.
Mis manos hablaron de otras cosas,
y tus ojos sedujeron al deseo.
Éramos ya fantasmas del anhelo, magias de luna y sol
armonizadas en ese confuso terreno fronterizo
que separa el todavía estar del ya no hallarse.
Una vez más, bebimos las promesas
para luego incumplirlas, como siempre.
¡Cuántas mentiras se dicen de verdad!
Yo lo sabía, aunque no lo hubiera oído de tu boca:
Eran minutos de intimidad furtiva
que no fueron creados para prolongaciones
ni eternidades.

Y no recuerdo si eran las seis o las siete.
Me duele no saber si contamos (o no)
con esa hora.
Marta Fagés, 16 de abril de 2004

sábado, septiembre 27, 2008

Me contabas un cuento....



Me contabas
Un cuento,
Yo miraba tus labios...
Me contaste
Tus sueños,
Me contabas
Lo que fuiste
Y navegó
Entre tus manos
Un oasis
De arenas blancas...
Ellas,
Tus manos,
Podían
Hacer perlas
Sobre el aire
De tus palabras.

Era una tarde de mayo,
Aquel camarero
Nos miraba
Y me contabas
Tus miedos
Como un eco
De una llama,
Como un naufragio
Sin alma...

Dibujaste
Con tus dedos
Dioses sobre el cielo...
Yo me detuve en tus labios,
Mi sed
Ya se derramaba
Y de esas perlas
Que hacías
Me saciaba...

Besé por fin
Tus labios,
Me abrazaste despacio
Y aquella tarde de mayo
Aquel camarero
Nos miraba.

Tus labios
Las brasas
Que soñaban,
Y yo era la sangre,
Era el agua,
El fuego
Entre aquellas perlas
Que te amaban...

Me contabas
Tu vida
Y yo tus labios
Miraba...

Me contaste
Tus sueños
Y yo con besos
Soñaba...


Era una clara tarde
De mayo
Y aquel camarero
Nos miraba,
Y me contaste
Tus miedos
Como el eco
De una llama,
Como un grito
Sin sonido,
Como un naufragio
Sin alma...

Me contaste
Tus sueños
Y yo con tus besos
Soñaba...

Enero del 2000 52
Cleo

sábado, septiembre 06, 2008

Del Blog y programa de radio " Llegir en cas d' incendi " de Xavier Borrell



Gracias Isi, este es el más bello comentario que he recibido de Petra, y no he podido resistirme en ponerlo aquí, eres grande Isi, ya sabes que te estimo mucho. Y tambíen muchas Thanks a Xavier Borrell, escritor también de editorial Maikalili, y enhorabuena por tu programa de radio y blog, Llegir en cas d' incendi, seguro que va a ser todo un éxito.


Isabel del Rio ens porta una nova ressenya.

Petra, una novela de amor, pasión, erotismo y poesía entre las dunas de los sueños.
Petra te cautiva... no son sólo sus personajes llenos de ternura y sufrimiento humano, no es su sensual y perdida protagonista, Sofía, no son los infinitos parajes que los envuelve, ni los hipnotizantes ojos de Petra, sino el conjunto. Es una historia que te introduce, verso a verso, con sus poemas de cabecera, en un mundo lleno de aromas exóticos y prosa con melodía.
Marta Biarge ha conseguido, con su primera novela, seducirme con su manera de contar la vida, donde la dulzura infantil y una cuidada narrativa se entremezclan.
Cuando Sofía descubre a Petra, el lector participa del flechazo, de las alegrías y el sufrimiento de un amor que no sabe de fronteras ni clixes. Es así como empieza nuestra historia, en un avión, con dos miradas al cruzarse, la de Sofía, nuestra protagonista, y la de Petra, una cautivadora azafata.
Sofía es una mujer entregada a su trabajo como artista que viaja por placer, lo que no podía imaginar era que su encarnación iría en el mismo vuelo, junto con ella. Petra y Sofía se enzarzarán en una relación dolorosa, una relación con tal pasión que romperá la realidad de ambas.
Petra es una novela erótica, pero también una historia romántica que nos habla del amor insondable que puede surgir entre dos mujeres.


Mua Isi

Fuente: http://llegirencasdincendi.obolog.com/ página del escritor y programa de radio de Xavier Borrell, en el que Isabel Del Rio Sanz, es colaboradora.

sábado, agosto 16, 2008

Cuentos y Fábulas de Lola Van Guardia

Para las que todavía no hayáis leído este maravilloso y divertido libro de relatos, como todos los libros de Lola Van Guardia, o sea, Isabel Franc. No dejéis de hacerlo. Remarco como los mejores según mi gusto; El cuento de la princesa frígida,, Mentiras conyugales,, No sólo de sexo vive una lesbiana,, Díptico,, Gallina hetero en corral les,, La rebelión de las gallinas les,, jaja,, Las conejitas y la reina de la selva,, bueno y algunas fábulas más. Enhorabuena, Isabel Franc, porque has marcado un estilo muy personal, lúcido, divertido, irónico; que te hace olvidar tanta tontería de esta life, además de pasar las páginas en su lectura rápida y armoniosamente, algo muy difícil, no creáis. Escribir es un arte, y hay que divertir. Qué vamos.... me siento totalmente influida en mi modesta escritura por esta escritora, y estoy aprendiendo un montón con ella. Si no fuera por el sentido del humor, qué haríamos mis queridas.


cleo

domingo, agosto 10, 2008

Y LO QUE NO SUPO UNIR LA TIERRA Y LAS PALABRAS, LO UNIÓ...... LAS UNIÓ LA ETERNIDAD........





LE CANTABA RENÉE A LORÉLY.......EN UN RINCONCITO MUY ÍNTIMO

RENÉE VIVIEN; SE ME APARECIÓ UNA MUJER.......





.........Pronto iré a reposar al bienhechor Mediodía. Allí hay pinos floridos de rosas, glicinias que cuelgan hasta el suelo, olivos del color de una ola en el crepúsculo.....En las montañas, la hierba está azul de violetas. Lechos de algas visten de púrpura el mar. El sol es tan potente que disipa todos los males....Vente allí.....

sábado, julio 19, 2008

domingo, julio 06, 2008

Air.......

Cosmos – Volar

Cuantas veces
Se preguntaba
Lo mismo....

Si el hombre
Podía caminar
Sobre la tierra
Sintiendo bajo sus pies
El polvo desprendido.
¿ por qué entonces él no podía volar..... ?

Cuantas veces
Se preguntaba
Lo mismo....

Si el hombre
Podía nadar
Sobre el mar.
Si mi cuerpo
- decía –
Puede atravesar
Las olas.
Si de todo esto
Soy capaz
¿ Por qué ..... Por qué....... no puedo volar...... ?


Y se fabricó
Unas alas
Con ramas y plumas
Para volar....

Y así un domingo cualquiera,
Día celestial.
Desde lo alto
De la iglesia
Impulsado por la cigüeña
Comenzó......... Comenzó a volar.

Y sobrevoló el aire
En silencio,
Y recorrió cielos....
Mares.....
Recorrió tantas ciudades,
Él tan sólo quería...... volar.

Colmó su cuerpo
De mares celestiales
Que le hablaban,
De desiertos blancos,
De desiertos dorados
Donde algunos dioses
Le gritaban.....
“ Ése.... ése no es tu lugar....”


Lleno su cuerpo
De amaneceres y crepúsculos,
De atardeceres de fuego
Que casi le quemaban.
De noches estrelladas
Que de tan bellas
Nunca
Nunca
Acababan.....

Y de su cuerpo,
De sus brazos
Comenzaron a crecerle
Unas alas.

Pero un día cualquiera.....
Comenzó a sentir
Que moría.
Que poco a poco
Se moría.....

Cada día volaba
Más y más triste.
Cada día volaba
Casi sin volar.

Añoraba
A su islita
A su mar....
A su cielo celestial.
Al calor
Que desprendían las rocas
Cuando el mar
Con violento deseo
Las amaba.

Recordaba....
Cómo el sol
Estremecía a la arena
Susurrándole palabras.
No recordaba
Haber visto
Un lugar tan .......... Inigual.
Cada día
Cada minuto,
Cada madrugada
Se cansaba más de volar......

Y comenzó a amar
A la tierra
Como se la debe amar.
Como se ama a los Dioses
Y a toda la Eternidad.......

Entonces descendió
Desde los cielos
A su islita
Y le preguntaron
¿ Cómo es ..... Cómo es volar...... ?

Y él respondió;
Sólo puedo deciros
Que volar es muy bello,
Que toda la tierra.....
Que todos los mares......
Todas las ciudades
Son maravillas....

Pero mi islita
Es lo más celestial
Que jamás pude imaginar.....

Ahora...... sé
Que ya puedo volar
Sin volar......


Pd: Y si tú crees no saber volar,
Baila conmigo.....
Air de Johann S. Bach
No sé dónde acabaremos,
Que más da.......
Seguramente sobre el cielo
Iremos volando
Hacia
La Eternidad....
El lugar más bello
Sin dudar.....

domingo, junio 08, 2008

domingo, mayo 11, 2008

PRESENTACIÓN DE PETRA EN LA CASA DEL LIBRO DE ZARAGOZA ..........fue preciosa

La autora de esta Presentación en imágenes, que es la que podéis ver en el post de arriba, es Ana Asensio Burriel, amiga y poeta. Un besazo, Ana, por tu precioso y maravilloso trabajo, todos nos quedamos soñando y boquiabiertos viendo tu creación; lovely. Y Francesca Madrid i Torrebejano, también amiga y poeta, hizo la presentación oral, muy bellamente, relatando, conforme pasaban cada uno de los capítulos y sus imágenes, cada poema que contienen. Y aquí van unas fotitos, para que podáis sentir, los que no habéis estado, lo que fue la presentación, y para los que si estuvisteis, un sencillo y bonito recuerdo. Nila Cadanteva, nos acompañó la velada con las delicias de sus manos sobre su violín. Y muchas gracias a ti, Hermelo José Delgado, Director de la Casa del Libro de Zaragoza, por tu inestimable ayuda y colaboración en todo momento. Un beso a todos. Y sobre todo a Octavi Franch, Director de Grup-Senar, y editorial Maikalili, por hacer posible mi sueño.......... Gracias Octavi.......














domingo, abril 20, 2008

PRIMER CAPÍTULO......... PETRA YA SOBREVUELA SU SEGUNDA EDICIÓN........MUAA MUAC...... PETRA


CAPÍTULO PRIMERO
CIELO AZUL
Verano de 1988



Cuando tu alma
esté llena de mar,
sentirás a las olas
fuerte galopar,
entonces
te agitarás....
mas
yo me abrazaré
a tu cuerpo,
en un eterno balancear....

Sofía
Fishawy. Tarde Clara



Este viejo café sabía entonces a menta, a tomillo adormecido en fresca canela, a un sueño eternizado, a la tarde de constante siesta de verano, cuando lo descubrí durante mi primer viaje a Egipto. A veces, algún pequeño gorrión se acurrucaba en mi vientre cuando dibujaba sobre mis cuartillas, y al asustarse de repente, sus alas se agitaban tensas en un susurrante vuelo de plumas. Alrededor del café, situado en el casco viejo de El Cairo, las calles eran desordenadas, imperfectas, unas aceras más altas que otras, unas calles más estrechas que otras.
Algunas de estas calles siguen hoy llenas de magia, poseen el don del misterio, de otras sin embargo se apodera la ira y la falta de entendimiento, como ocurre con todas las calles de todas las ciudades. Pero la belleza como parte de la naturaleza y de lo humano, sólo encuentra su perfección, su plenitud en lo imperfecto. Y nada hay más imperfecto que hombre y naturaleza, siempre en una constante génesis de sí mismos.
No. No fue en el café Fishawy de El Cairo donde realmente vi por vez primera a Petra. Donde la contemplé por primera vez fue sentada en un avión de la compañía Aerospace. En realidad, el avión comenzaba a despegar a una enorme velocidad, logrando ascender con una inclinación de unos cuarenta y cinco grados y un ruido bastante relevante. Sinceramente, reconozco que el estrépito de los aviones me pone un poco cachonda, no sé por qué. Debe de ser que el riesgo también fluye en alguna de las habitaciones del deseo. Yo realizaba mi viaje de verano entonces, durante las primeras fechas del mes de agosto.


Como compañeros de viaje, Carlota Villa y Eduardo Sanz, dos amigos de mi juventud. Juntos fuimos al instituto; Miguel Fleta. Aún recuerdo el sabor de las "pirolas" mezcladas con caña y cigarros. Más tarde siguieron las "pirolas" en la escuela de Bellas Artes. Todo era más importante que acudir a las aburridas sesiones de Historia del Arte, y sin embargo, al hacerme mayor pienso en lo insensata que era, ahora disfruto con cualquier pequeña conversación de un profesor de arte.

Carlota Villa es una excelente y aclamada crítica de arte, especializada en pintura del siglo XVIII y XIX. Además de escribir en varios medios de prensa diaria, es asesora en plantilla del museo del Prado. Esta separada. Julio, su ex marido, la abandonó por Miguel Pray, un guaperas siempre asquerosamente bronceado con brillantes cremas pegajosas y rayos ultravioleta. Miguel Pray me ataca los nervios, posee el tic de tocarse no -sé - por qué - el paquete, seguramente como petulancia masculina, o a saber, igual la tiene de tamaño hormiga china. Pobre Julio, encima con carencias, con lo sensual que es Carlota. Así es la vida. ¿ O quizás así es el amor? ¿ O el capricho? ¿ O el deseo?. Estoy hecha un lío. En el caso de Julio de veras que no lo entiendo. Únicamente Miguel Pray está bien económicamente, ya que posee una de las galerías de subastas de más renombre de Madrid, la "Times", ubicada en un lujoso local del hotel de Oriente. Quizá sea por eso. El caso es alternar con todos los Chics y Fifis de Madrid.

Eduardo Sanz es mi representante y el de muchas otras pintoras y escultoras de toda la península. Tiene un gusto exquisito para todo, y enseguida es capaz de reconocer a un buen artista tan sólo a través de unos leves trazos de sus manos. Eduardo sigue soltero, pero no está solo. Convive desde hace dos años con Pablo, un joven de apenas veintidós años estudiante de Bellas Artes, en la rama de dibujo artístico. Eduardo y Pablo están felizmente enamorados, sólo hay que fijarse en sus miradas para darse cuenta de ello. Viven en el lujoso ático de Eduardo en la Plaza Mayor. No desean tener hijos ni perrito que les ladre. Y si Eduardo tiene un especial atractivo muy sensual, Pablo es él autentico guapo que no conoció varón hasta que Eduardo se cruzó por su camino.

Carlota anda un poco desquiciada de ligue en ligue, y como ella no entiende y no le gustan las niñas, deberá seguir cabalgando, caminando hasta encontrar su hombre ideal. Ojalá que lo encuentre pronto, porque desde su separación tengo en ella a una buena amiga, a pesar de ser una mujer ansiosa que no cesa de comer y acudir al psicólogo cada semana. En el fondo lo único que necesita es amor, como cada quisqui, y el día que encuentre el amor comerá como una persona normal. Pobre Carlota, qué gorda que está.


Pero volvamos a aquel pequeño avión de la compañía Aerospace con destino a Nueva York. Como el ruido de un seco golpe ella estaba allí, ocupando todo mi espacio pensante. Al observar su rostro, me di cuenta que ella también me miraba. Creí ver al mar uniéndose con el cielo en aquel instante. Nubes blancas con destellos dorados viajaban hacia un infinito de sol amarillo y luna blanca. Después vi desiertos con camellos, dunas de enormes cimas que no lograba alcanzar, me hundía entre su tostada y caliente arena. Mi boca se agrietaba por el sol. Desperté de estos pensamientos y me di cuenta que nos seguíamos observando rostro a rostro, pupila con pupila que en ella eran negras como una noche extensa, profunda. En sus pupilas de noche observé ese abismo en el núcleo de la tierra que siempre estoy buscando en todo, en las palabras, en el sol emitiendo ebulliciones constantes e incandescentes, en la tierra sostenida por sus permanentes fluidos internos, en la luna atraída constante por el calor que hay aquí en la tierra. En sus pupilas de noche vi el fuego de ambos, sol y tierra, y su avión era el ventilador que apenas podía dar un poco de aire y libertad a tanto calor interno. Por un momento sentí que yo era la expendedora de billetes de un gran cine de Madrid, aquélla era una calurosa tarde de agosto. La película debía de ser magnifica, porque yo no cesaba de vender entradas, no daba abasto. Logré ver cientos de rostros y todos me resultaban igual de monocromos, todos me parecían vulgares, unos rostros incluso se parecían a otros, unas voces a otras. Después de ver casi mil rostros, unos detrás de otros, apareció en aquel ensueño el suyo, sus negras pupilas. Abrí los ojos de mi ensoñación y ella ya no estaba. Era como si el universo se hallase en su mirada, y sólo yo pudiera darme cuenta de ello y absorberlo.


El vuelo fue pesado, como todos los largos recorridos, pero tranquilo. Carlota durmió a mi lado durante la mayor parte del trayecto. Aquella misteriosa mujer ejercía sus labores de azafata, atendiendo amablemente y con dulzura en el rostro a todos los pasajeros que estaban a su cargo. Cuando en una ocasión se acercó con acento de sirena para ofrecernos refrescos, café y algo de comer, su perfume de Guerlain alcanzó las cimas de mi éxtasis, y mi mente pareció adormecerse por alguna exótica droga.
- Sí, otro café - contesté. - Si, solo – subrayé. Como si dudase que alguno de los cafés anteriores hubiese sido acariciado por unas gotitas de éxtasis infinito. Pensé, ¡ si pensé !, en lo maravilloso que sería amarla en la verde estatua de la libertad, por la noche a oscuras, medio desnudas, sobre la luz de una luna salvaje y dulce. Por un momento me imaginé desnuda, invadida de placer, ella también lo estaba, y yo observaba todos los límites de su cuerpo. Cuerpo como esculpido por una diosa. Como pintora y escultora no podía permitir dejarla escapar de mis manos sin contornearla sobre un lienzo. Deseaba sentir el palpitar de su vientre con la arcilla moldeándose entre mis manos, el temblor ligero de sus senos al cambiar suavemente de postura. Debía ser lo suficiente seductora como para poder arrastrarla en la fecha que ella determinara a mi pequeño estudio de Madrid y allí eternizarla, perpetuarla sobre mi arte. Necesitaba desnudarla poco a poco con la sola luz de nuestras pupilas, con la única sombra de nuestro aliento. Me urgía silenciosamente rozar sus flambeados pechos, besarlos, acariciarlos, recorrerlos con mis labios. Sentir después despacio la respiración agitadamente entrecortada en su vientre, y llegar a su sexo sólo y cuando ella lo deseara. Y entrar en ella y permanecer allí eternamente, eternamente. Pero esta vez era tan bello aquel rostro, aquel gesto, sus manos, los pensamientos de su mente, que me encontraba dispuesta sólo a adorarla, a mirarla, a abrazarla. Besar su rostro y perderme entre sus manos, devorar el dulce lago de su cuello.
Volví a la realidad después de esta ensoñación, ya estaba otra vez dentro de aquel avión. La realidad, algo que realmente nunca me ha gustado demasiado. El ilógico y desenfrenado mundo real.
El comandante hablaba a través de la megafonía del avión. Decía que quedaban unos veinte minutos aproximadamente para que nuestro avión aterrizara en el aeropuerto de Nueva Jersey, muy cerquita de la gran manzana.
Al pasar ella a mi lado le pregunté:
- ¿ Por favor, azafata, podría traerme otro café? ¿ Perdón señorita, cómo se llama?.
- Petra - me respondió con su sensual voz.
De repente, sentí ser la suiza Burchardt, redescubridora en el siglo XIX de la bella ciudad de Petra en Jordania. Me vi sentada a lomos de un lento y pesado viejo camello, el único que me habían vendido unos malditos lobos del desierto. Yo iba por el cañón del "Sig" a lo largo de kilómetro y medio, sudorosa, sucia y extenuada, cuando me encontré con un celestial macizo de roca rosa, esculpido por las hermosas manos del hombre.
- Me llamo Petra, señora – me dijo ella más fuerte.
Yo entonces todavía transcurría a lomos de mi lento y pesado camello, en el valle de un desierto de cautivadores paisajes rosas y dorados. Era el valle del desierto de Petra.
- Petra – volvió a decir rápida y entrecortada, tanto que me asustó.
- Ah, sí, señorita gracias, un café.
- Señora, esta prohibido servir nada a los pasajeros treinta minutos antes de aterrizar. - La suavidad de su acento me estaba anestesiando de nuevo hacia el paraíso, sin quererlo yo.
- Petra. – contesté con una decisión inusual en mí, y comencé a tutearla– En ese caso, te invito en el aeropuerto a un café, si es que quieres aceptarlo.
- Bueno… - dijo bajando mucho el tono. Permaneció por unos instantes con la mirada fija en mis pupilas, creí que se metía dentro de ellas. Casi me hipnotizó, al tiempo que mi mente escuchaba el eco de estas palabras que se balanceaban en aquel susurro de su voz. - Te invitaré yo en la sala que Aerospace tiene adjudicada en el aeropuerto de Nueva York, a las cinco y media. Te espero en la entrada VIPS, del techo cuelga una escultura movible de Calder. ¿Conoces la obra de Calder ?.
- Si, ya lo creo que la conozco; soy escultora.
- Okey – me dijo, dentro de una mirada incrédula.
- Y te diré una cosa, Petra, Calder no sólo creó sus famosas esculturas movibles, también creó joyas y otros objetos decorativos.
- Muy bien – se sonreía - Entonces, de acuerdo. Bueno, Marieta - dijo disimulando algo más alto - me alegro mucho de volverte a ver.
Caí en la cuenta de que las azafatas no pueden flirtear con los pasajeros. Ella había tenido más cuidado que yo e intentó disimular colocándome el nombre de una supuesta amiga llamada Marieta. Qué lista es esta tía, pensé meditativa, a la vez que mi mente alucinaba con esa forma de quedar para tomar un café, dentro de un avión, con una bella azafata desconocida, y con el hecho de que sin conocernos ambas hubiéramos congenidado de ese modo. Pensé que Petra entendía todavía mucho más que yo, lo cual era un alivio, invadido el mundo como está de mujeres que se sienten atraídas por mujeres y ni siquiera han abierto la puerta de su mente o del armario. Qué alivio.
Creo que sólo el destino es capaz de hacer estas maravillas.
Vi en mi sonrisa, la sonrisa del amor, la típica cara de tonta que se nos pone a todas ante el amor. Y noté como de mi pupila derecha se desprendía una lágrima enorme, transparente, recorriendo mi pómulo hasta los labios. Ellos son los que mejor recogieron el sabor de lo que había producido en mi mente Petra. Aquella lágrima, siempre de la pupila derecha, volvería a brotar cientos de veces después de conocer a Petra. No sé por qué, pero decidí recogerlas. Cuando divagaran lentas sobre mi pómulo derecho, las ingresaría en un pequeño frasco de cristal transparente. Así estuviera lleno el frasco, lo guardaría para siempre. Entonces, desde ese día en el que yo nunca pensaría, en que se acabara nuestro amor, cada día en falta de su cariño y su presencia, yo bebería una lágrima. La lágrima recorrería lentamente mi garganta, deslizándose por ella llegaría a mí estomago, y luego absorbida, pasaría a mi sangre.
Y a través de mi sangre recorrería todo mi cuerpo en una procesión de amor. Hasta quedarse dormida sobre mi corazón. Y allí, durmiente la lágrima, me procuraría el alivio eterno de la ausencia, el alivio del dolor del amor.

De modo que aquel pequeño frasco, poco a poco, iría inundándose de lluvia de lágrimas por Petra.

sábado, marzo 29, 2008

PETRA YA A LA VENTA

SINOPSIS PETRA

Sofía comienza a escribir su historia de amor. Recuerda aquel verano de 1.988 con destino a New York. Allí en el avión, Sofía conocerá a Petra, quien ejerce sus funciones de azafata y surge el flechazo entre ambas. Comienzan un breve romance en el hotel Waldorf Astoria. El perfume del jazmín de Egipto y el poema “Ítaca” de Cavafis, llegarán a constituir un enigma y una obsesión para Sofía, ya que ha de encontrar la esencia más perfecta y recorrer el camino hacia Ítaca, para hallar la felicidad y el amor que no posee. Pero Petra convive en pareja desde hace varios años con Lucia, un ser dominante y frustrado como tal. Finalmente, Lucia, encontrará a su Ítaca, a su verdadero amor, Genoveva, en un convento de clausura en Sevilla, y Sofía y Petra, se irán a vivir a Egipto, hallando cada una de ellas, el verdadero amor de su vida. En sí, Petra, es una novela sumamente poética y erótica, envuelta en una atmósfera repleta de sensualidad, donde la feminidad y los juegos eróticos conforman el nucleo central de la narración. En numerosas ocasiones, lirismo y prosa se funden a través de imágenes enormemente poéticas y sugerentes.


De momento está a la venta en Zaragoza, ciudad en la que actualmente resido. La podéis comprar en El Corte Inglés de dicha ciudad, Librería General, Librería Central, Librería París y Librería Cálamo. También está a la venta en Barcelona, en Tu Libro, y en Librería Complices - se puede comprar por internet en - http://www.libreriacomplices.com/ http://www.tulibro.com/ poniendo en el buscador mi nombre, marta biarge, y ya sale directamente el libro para su venta- También se puede comprar en Soria. Bueno, poquito a poco, pero creo que, Petra, debe tener su propia vida y ya debo dejarla volar en libertad. Un beso Petra, me has costado mucho, muchísimo, primero llevarte dentro de mi vientre, cuánto me hiciste disfrutar mientras te ibas formando poco a poco, después te di a luz, y aquel parto no fue nada doloroso, y te he ido viendo crecer poquito a poco, durante estos 8 largos años, quizás como el Meidum Egipcio de 8 escalones antes de que se precipitara - los números no fallan, han hecho fuerza, para que te disperses en otros cuerpos, en otras almas y en otras manos. Ya sólo puedo despedirme de tí y decirte que siempre puedes contar conmigo, y que intentes siempre ser felíz y hacer felíz a quien te posea. Te quiero mucho Petra......... Mi deseo, mi mensaje y mi promesa; quien la lea, encontrará a su Ítaca, a su verdadero amor, eso seguro. Un beso para todas y todos, y también para Marta Fagés, quien me escuchó desde un principio, y me animó en esta difícil tarea que es escribir y publicar.